El europio se obtiene a partir de la arena monacita, esta es producto de la conjugación entre tres fosfatos de cerio, calcio y torio, su descubrimiento fue en 1896 por el químico francés Eugene-Antole Demarcay obviamente no se extrajo el europio totalmente puro sino hasta el año 1901. Este metal de tierra rara cuenta con un número atómico equivalente a 63, y se representa con el símbolo Eu, su nombre hace honor al continente europeo donde reside el científico que descubrió a este elemento como se mencionó anteriormente.
Debido a su alta reactividad este metal es muy utilizado en el área atómica, siendo empleado para la fabricación de veneno nuclear los cuales se usan para equilibrar el exceso de energía reactiva en el reactor nuclear, a su vez puede ser utilizado para la elaboración de pantallas para televisores, ya que los mismos se encuentran compuestos por varias sustancias fosforescentes que se están patentadas, aquí entra el trabajo del europio ya que este permite la activación de dichas sustancias y que emitan el color deseado; otro uso de este compuesto es la producción de rayos láseres. Su uso no es comercializado a todo el público, debido a su alto toxicidad se debe trabajar con bastante cuidado por tal razón se exige cumplir con varios índices de seguridad antes de que se permita el acceso al producto.
Al igual que muchos elementos de la tierras raras, se hace toxico en el momento en que se produce una inhalación constante de sus gases, presentándose así complicaciones respiratorias que pueden comprometer la vida del paciente como lo es la atelectasia o la embolia pulmonar, otro efecto que puede producir la constante absorción de este químico es daño a nivel hepático, el cual sería un daño agudo o crónico dependiendo de la exposición a la que se halla sometido el paciente.