Esta patología puede ser presentada como efecto adverso de diferentes fármacos que actúen a nivel del sistema nervioso central como neurolépticos, metroclopramida (irtopam) cuando es suministrado por via endovenosa, antihistamínicos, antieméticos, antidepresivos y fármacos a fines; la fisiopatología de la acatisia no es descrita con certeza pero algunos autores lo describen como un bloqueo de los impulsos dopaminergicos mesocortical.
El principal tratamiento de la acatisia es detener el consumo del fármaco sospechoso causante de esta patología, o la administración de otros fármacos en caso de que la prescripción sea de por vida tales como tranquilizantes, antihistamínicos u otros fármacos como propanolol, benzatropina, benadryl, benzodiacepinas entre otros, otro método para el tratamiento seria ejercicios físicos para lograr la relajación muscular y reducción del estrés. La acatasia cursa con manifestaciones clínicas que son muy parecidas a otras patologías lo que dificulta en gran medida el diagnóstico de la misma, enfermedades como el síndrome de las piernas inquietas, fibromialgia, miclonia nocturna, etc, para la diferenciación de la misma se le evalúa al paciente con una escala llamada escala de acatisia de Barnes, también puede diagnosticarse por la evaluación de algunos exámenes de laboratorio como ferritina sérica, CSC entre otros.