El sujeto lleno de complejos, se encuentra en un estado de perturbación por todas esas emociones y pensamientos que se construye mediante sus expresiones. Por ejemplo una joven que constantemente recibe burlas porque es obesa, estará acomplejada por su condición física y evitará asistir a la playa o la piscina así como también dejará de asistir a las fiestas, por temor a que se burlen de ella. Como se podrá observar, este complejo mental termina por influir en el comportamiento de la joven, ya que quizás la chica si desea asistir a la fiesta o a la playa, pero prefiere no hacerlo.
El complejo se origina a partir de la no aprobación de la persona, hacia alguna característica física de su cuerpo. Partiendo de la apreciación que tenga una persona de sí misma, esta podrá desarrollar una sensación de incapacidad, convirtiéndose de esta manera en un sujeto acomplejado, que no es capaz de sentirse pleno.
Existen personas que manejan el complejo mejor que otras. Sin embargo lo más conveniente, es dejar atrás todo aquello que lo mantiene inseguro de sí mismo. Los psicólogos recomiendan lo siguiente:
Primero se debe comenzar reconociendo la causa que lo mantiene acomplejado.
Es necesario que el acomplejado busque terminar con todos esos pensamientos que lo mantienen en ese estado.
Otro punto importante es tratar de aceptarse tal cual es, ya que nadie es perfecto, todos somos diferentes y lo que verdaderamente importa, es el lado positivo que se tiene de eso.
No es sano anclarse en los defectos que se tengan, la persona debe tener en cuenta lo bueno y positivo que tenga en cuanto a la personalidad o a la parte física.
De igual manera, existen muchas herramientas de las cuales echar mano, una de ellas es recibir psicoterapia con un buen especialista, que lo ayude a superar estos complejos.