La elaboración de un acta permite que la reunión celebrada tenga validez, y si se llega a dar el caso puede servir de prueba si se presenta algún inconveniente.
En un acta puede estar descrito todo lo dicho en una reunión, los resultados de unas competencias, elecciones, etc., también las calificaciones estudiantiles, los resultados de la lotería, la celebración de una boda, entre otros. Un acta por lo regular siempre debe llevar la fecha, lugar y la hora en que se realizó, además de una pequeña introducción del motivo de la realización de la misma. Generalmente éstas son guardadas o registradas en un libro de actas, en el cual están todas las actas hechas durante un periodo determinado, y de forma cronológica, tomando en cuenta que todas sus páginas deben estar enumeradas para llevar un orden.
Una vez finalizada la reunión y terminada el acta todos los participantes dan el visto bueno de todo lo plasmado en el acta y se procede a la firma de la misma, cada uno de los participantes deben firmar, dejando así una certificación de su intervención y aceptación de todo lo escrito en ella.