Los amperios son utilizados para expresar el flujo de carga eléctrica. Para cualquier punto que experimente una corriente, si el número de partículas cargadas o la carga de las partículas que pasa por dicho punto incrementan, los amperios incrementarán proporcionalmente. La Ley de Fuerza de Amperio establece que hay una fuerza que atrae o se repele entre dos cables paralelos que transmiten una corriente eléctrica. Está fuerza es lo que se conoce oficialmente como amperio, el cual es la corriente constante que producirá una fuerza de atracción de 2 × 10−7 newtons por metro del largo entre dos conductores paralelos en posición recta, de una longitud infinita y una sección circular insignificante ubicadas a un metro de separación en el vacío.
Algunos ejemplos cotidianos que incluyen el amperaje pueden ser los siguientes: Un dispositivo de ayuda auditiva puede tener unos 0.7 mA, un televisor de 56 pulgadas de tecnología plasma unos 250/290 mA, un horno pequeño o tostadora 120 mA, un bombillo de luz incandescente 500/830 mA, y un secador de cabello tiene una cantidad de 15 mA aproximadamente.