Existen acciones que la ley prohíbe en ciertos marcos o situaciones, a fin de llevar a cabo algunas de aquellas actividades que la ley actual lo prohíbe, será necesario tramitar ante quién corresponda la autorización correspondiente. Algunas autorizaciones requieren la intervención de la justicia y otras solo de alguna autoridad competente.
Un claro ejemplo de autorización puede ser otorgado por el entorno escolar. Por lo tanto, en este contexto, las autoridades de una determinada institución educativa requieren muchas veces la autorización de los padres para realizar diversos tipos de acciones. En efecto, el poder de disponer de un menor se deposita en sus padres o en un tutor legal y es desde esta perspectiva que son estos adultos los que deben tomar una decisión que afecta de alguna manera el comportamiento de los menores. Algunos ejemplos en este sentido pueden ser la necesidad de recurrir al consentimiento de los padres para desplazar al niño o para tener acceso a ciertos tipos de contenido.
Muchos son los modelos de autorizaciones que podemos encontrar. Sin embargo, todos ellos, independientemente del campo en el que se otorgan, deben tener una serie de datos esenciales. Así, por ejemplo, sería el nombre completo de quién otorga la autorización, así como otra información de interés, como el número de su documento de identidad y su dirección, los datos personales de la persona que usted autoriza y el propósito de dicha autorización.
Para la tecnología de la información, la autorización es la parte de un sistema operativo que protege los recursos del sistema, de modo que sólo puedan ser utilizados por usuarios que tengan permiso para hacerlo.
Por otro lado, las autorizaciones también son frecuentes al ingresar a lugares que tienen acceso restringido al público en general, ya sea porque son exclusivos o porque llevan a cabo tareas importantes, que requieren secreto.
En estos casos, las autorizaciones abandonan el documento y pueden adoptar formularios electrónicos, es decir, por ejemplo, se da una clave numérica a alguien para que pueda acceder a una oficina que debe marcarse en un teclado.Si la clave que se ingresa es correcta, las puertas se abrirán y, de lo contrario, la entrada será denegada.