Por otro lado, estaba la curia romana que se define como el conjunto o grupo de entes del gobierno de la llamada Santa Sede y de la Iglesia Católica. La curia romana estaba formada por una serie de instituciones a las cuales se les llamaba dicasterios, cuyo dominio dependía del Papa, que ejercen las funciones legislativa, judicial y ejecutiva. El propósito fundamental de estas instituciones es organizar para el excelente funcionamiento de la Iglesia.
Además se conoce por curia a una organización o grupo de abogados, procuradores, jueces y funcionarios que trabajan en la administración de la justicia donde se trata de los negocios, como órgano consultivo, de decisiones y gobierno. El nombre de curias fue adoptado y redactado por la iglesia para definir las decisiones del gobierno, formado por asociación o reunión de personas o cosa con un objeto o finalidad comunes de tribunales y oficios que ayudan al papa a despachar todos los asuntos relativos al gobierno.
El significado del tribunal para la palabra curia fue empleada a partir de la edad media designado a todos los que ingresan a la iglesia en sus niveles de gobierno o de conjunto de trámites que se lleva a cabo para resolver un asunto administrativo ya sea la administración de una empresa de negocio, etc.