Las causas que motivan a un arrendador a mandar a desalojar a su inquilino pueden ser: expiración del contrato de alquiler. Falta de pago de dos alquileres. Necesidad del arrendatario de ocupar su propiedad. Necesidad de hacer transformaciones en el inmueble, etc.
Cuando el desalojo se lleva a cabo porque el inquilino no cumplió con el pago del alquiler, se debe cumplir previamente con ciertos pasos entre los cuales están:
- Se debe enviar una notificación por escrito en donde se identifique la causa del desalojo (incumplimiento de pago, desalojo por causa, finalización del contrato de arrendamiento).
- Citación judicial.
- Se presenta una demanda de desalojo.
- Respuesta del inquilino.
- Audiencia de desalojo.
- Desalojo.
Cuando el desalojo es sin causa alguna, en este caso el dueño de la propiedad no tiene ningún motivo para ordenar un desalojo. El propietario puede hacerlo si el contrato de arrendamiento expiró, de lo contrario no podrá desocupar al inquilino. El desalojo constructivo ocurre cuando, el dueño del inmueble recurre a métodos ilegales para desalojar al inquilino, por ejemplo cortarle la luz, cambiar las cerraduras, etc. esta clase de desalojo puede motivar al inquilino a tomar acciones legales en contra del dueño de la propiedad.