Es preciso tratar el tema de la razón, puesto que es aquello que, de acuerdo a su ausencia, determina a un disparate. Esta es la capacidad o facultad del ser humano, de identificar conceptos, hallar coherencia o contradicción en estos y cuestionar el contenido, fuente o credibilidad en general del mismo. Esta se rige por tres conceptos principales: el principio de identidad, el principio de no contradicción y el principio del tercero excluido, sirviendo todos estos para determinar la naturaleza del concepto que se le presenta. Si algún discurso o comportamiento se desvía de las tradicionales concepciones de la razón, entonces pasa a ser un sinsentido, un disparate.
Cabe mencionar la serie de obras realizadas por Francisco de Goya, considerándose una de sus creaciones de más difícil interpretación. Abundan las representaciones oníricas, la violencia y el sexo, además de la ridiculización del régimen impuesto en aquella época (circa 1816). Se tocan algunos escenarios, como el carnavalesco, el grotesco y el nocturno.