Un cardenal (eclesiástico de alto mando en la fe, es el más alto título honorífico, que puede ser otorgado por el Papa). Esto se considera una Eminencia.
Un médico que ha dedicado años y años dedicándose a una especialidad impecable y perfecta, porque ha logrado contrarrestar enfermedades de los tratamientos indicados, será tomado como una eminencia en la especialidad en la que se desempeña, y entonces todos querrán entiéndalo y, por supuesto, también recibirás el reconocimiento de tus colegas.
En tanto, la persona que es valorada y sobresaliente en algún campo o tarea se llamará eminente.
Es eminente por las contribuciones originales y esenciales hechas.
El eminente se destaca del promedio y del resto de sus pares porque ha hecho contribuciones sustanciales, originales, y eso cambió el curso de los eventos en el campo en cuestión.
Por lo general se aplica a científicos, intelectuales, médicos, físicos, entre otros, pero es importante decir que en cualquier entorno profesional es posible encontrarse con personas eminentes que se destacan por una contribución especial, o por el esfuerzo que ponen en su trabajo.