Imperio

Qué es imperio

Se trata de un estado heterogéneo que fue formado a través de ocupaciones de territorios, el cual puede ir extendiéndose en la medida que no existan crisis económicas, políticas o militares que se lo impidan. Por otro lado, es aquél estado que es formado o gobernado por la figura de un emperador, que es una figura que se encuentra, incluso, por encima de los reyes, a quienes puede tener como vasallos.

En la antigüedad un imperio se exponía como la organización política que poseía extensos territorios que eran controlados, sometidos y oprimidos por un área o comarca central, como figura principal estaba el emperador, jefe del ejército o autoridad suprema.

Su etimología proviene del latín imperĭum, que a su vez proviene del verbo imperare, compuesta por el prefijo im que quiere decir “penetración”, más el verbo parare, que significa “ordenar” o “preparar”.

Actualmente, se utiliza el término para aludir a algún estado con una gran capacidad económica y militar. De igual manera, se utiliza para conceptos menos tangibles como el de una organización o idea, como el caso de Imperio Alpha, que es un movimiento virtual que difunde imágenes sexuales sin el consentimiento de los involucrados.

El título de “emperador” ya no se utiliza en la actualidad, salvo para el jefe de Estado de Japón.

Características de los imperios

• Su figura principal es la de un emperador, que se encuentra sobre los reyes, y cuenta con fuerzas militares.
• Su implementación es por la fuerza, mediante la ocupación de territorios, por lo cual es impositivo. En el escenario más pacífico, los imperialistas le dan la oportunidad a los conquistados a deponer sus armas, renunciar a las libertades y admitir al poder central que se les impone, sin hacer uso de la fuerza, siempre y cuando se haga de forma voluntaria.
• No existe la igualdad y es arbitrario.
• Se cobran altos impuestos, creando una relación de lealtad por conveniencia de parte del pueblo.
• Se define una estratificación, impidiendo a las clases más bajas el poder surgir.
• En las primeras manifestaciones de este sistema, estos no abarcaban territorios más allá de mares, como por ejemplo, los asiáticos.
• El poder de un gobierno imperial, va a ser directamente proporcional a su extensión geográfica.
• Su gobierno se concentra en la capital, que será reflejo de su poder y riqueza.
• A pesar de lo anterior, el poder debe llevarse a cada rincón del territorio y lo harán mediante representantes bajo el servicio del emperador de forma local.

Ejemplos de imperios en el mundo

Sacro Imperio Romano Germánico

Vigente desde el 800 hasta 1806, concentró en los estados germanos su centro de poder, teniendo, además de Alemania, posesión sobre el norte de Italia, Europa occidental y central. Este se originó en el reino de Germania, una de las tres porciones en las que fue dividido el Carolingio y reemplazó al antiguo Imperio Romano Occidental, luego de conflictos, el Carolingio se extinguió hasta que emergió Otón I.

A Otón I (imperando desde 962 hasta 973) le sucedieron Otón II y Otón III. Al morir este último, el cargo estuvo vacante, pues Enrique II fue coronado como Rey de Alemania, pero tuvo oposición para postularse como sucesor de Otón III. Posteriormente lo logra en 1014, sucediéndolos 29 emperadores más, siendo el último Francisco II hasta que él mismo disolvió el cargo y el imperio en 1806 para que Napoleón Bonaparte no pudiese apropiarse del mismo.

Imperio de Alejandro Magno

Inició con la muerte de Filipo II, su padre, en el año 336 a.C., imponiéndose en los pueblos gobernados por Macedonia que, una vez muerto su padre, quisieron rebelarse. Ciudades como Atenas, Tebas y Tesalia terminaron por reconocer su hegemonía. Además de Grecia, conquistó Asia Menor, Asia Central, Persia, Siria, Palestina, India y Egipto, y su poder militar era fundamentado con la falange (estrategia conformada por la infantería y caballería), con lo que dominaban ciudades amuralladas.

Este tuvo su culminación cuando luego de su muerte, en el 323 a.C., sus generales se disputaron el cargo, lo cual trajo la caída de este poderío.

Imperio Inca

Establecido en Sudamérica, su dominio fue el más extenso de la historia precolombina, con aproximadamente 2 millones de km2 conquistados desde el suroccidente de Colombia, sur de Ecuador, norte de Chile y gran parte de Argentina, y teniendo como capital el Cuzco, en Perú.

Se cree que inició en 1200 d.C. y existen datos acerca de los monarcas hasta 1438, que se conoció la existencia de Pachacútec gracias a diversas excavaciones, y también se conoció que para 1471 ocupó el trono Túpac Yupanqui, quien lo amplió hacia el sur y estableció su frontera en el río Maule. Luego en 1493 asciende al trono Huayna Cápac, a quien se le insurreccionaron pueblos sometidos, y cuando un inca moría, se daban las revueltas, pues lo veían propicio por verse debilitado el imperio.

Se cree que este se desvaneció por el descontento general, y que esto mismo hizo que colaboraran con la ocupación de España en el territorio.

Imperio neobabilónico

Fue fundado por Nabopolasar en 626 a. C., su primer mandatario, destacando Nabucodonosor (su hijo) al mando de las milicias, quien, luego de obtener la victoria en Karkemish, regresó a Babilonia donde lo nombraron rey posterior a la muerte de su padre en 604, expandiéndose desde Éufrates a Egipto. En el 612 a. C., los caldeos (pueblo semita babilónico) se alzaron con los medos y reconstruyeron Babilonia, previamente destruida por los asirios, separándose ambos pueblos.

Luego de la muerte de Nabucodonosor, en el año 562 a. C., se iniciaron una serie de luchas internas. Hacia 549 a.C., los persas incrementaron su poder con Ciro el Grande a la cabeza, ganando territorio y conquistando Babilonia, marcando su caída.

Imperio asirio

Fue de las principales naciones de la historia mesopotámica cuyo origen se sitúa en el año 2.025 a.C. y duró hasta 1.378 a.C. Este territorio incluía lo que hoy se conoce como Irán, Iraq, Líbano, Siria y Turquía; y su núcleo se centró en Nínive. En este territorio, que se dividía en dos áreas, se conformaba por el triángulo de Asiria, entre el alto Zab y el Tigris y por Assur. El triángulo de Asiria era una región abierta, ampliamente poblada, con gran potencial agrícola y contaba con un importante urbanismo.

Su primer emperador fue Puzur-Assur I, quien gobernó por cincuenta años y el último regente Ashur-nadin-anhe II, quien reinó hasta el nacimiento del Imperio Neoasirio, que duró hasta la caída de Nínive en el 612 a.C. debido al acoso al que eran sometidos por los medos y Nabopolassar de Babilonia.

Imperio azteca

Incluye pueblos de cultura náhuatl de Mesoamérica, que duró unos doscientos años, desde 1325 hasta 1521. La conformación de este imperio se basó principalmente en la unión de tres grandes ciudades, las cuales fueron: Texcoco, Tlacopan y Tenochtitlan, siendo esta última su capital, que es donde se encuentra actualmente la Ciudad de México. Su territorio se extendió por gran parte de las zonas de Mesoamérica.

Llegó a su fin a mano de los conquistadores españoles, liderados por Hernán Cortés, que colonizaron el territorio.

Imperio persa

Persia era un pueblo de Oriente medio (actual Irán), que constituyó una gran cantidad de dinastías en Europa. Después de ser un pequeño pueblo establecido al norte de Irán, los persas fueron gradualmente expandiendo sus territorios, con la dirección del recién coronado Rey Ciro II, quien los independizó de los medos. Conquistaron Lidia y Jonia; posteriormente Mesopotamia, Siria y Palestina, liberando a los israelitas en cautiverio, y más adelante, Egipto en unión de los griegos. Su sociedad estaba demarcada en sus clases sociales y los campesinos, que estaban al fondo, eran explotados, pues el sostenimiento de la economía recaía sobre el trabajo de sus manos.

Su duración se extiende desde el 550 a.C. con la dinastía aqueménida, comenzando a la cabeza Ciro el Grande y hasta el 329 a.C. Tuvo su caída cuando Alejandro llegó al reinado de Macedonia, quien impuso el poderío en Mesopotamia, Palestina y Egipto, en donde fueron recibidos como héroes. Posteriormente, dominarían Irán y Asia Central, marcando el fin del Imperio.

Imperios mexicanos

• Primer Imperio Mexicano: el imperio de Iturbide se implementó debido al movimiento de independencia de Nueva España, a través del acta de independencia del Imperio Mexicano, y su periodo se extiende desde 1821 hasta 1823, siendo México el único país de Latinoamérica que implementó una monarquía posterior a la independencia de España. Su extensión superaba los cuatro millones de kilómetros cuadrados, incluyendo a América Central, el centro y sur de los Estados Unidos, las Antillas y Filipinas.

  La bandera del imperio que definió esta época era tricolor del primer gobierno mexicano. A la cabeza de este gobierno estuvo Agustín Iturbide y su caída se originó por crisis económicas en este periodo, la independencia de Estados Unidos, además de diferencias políticas entre las que se incluían las intenciones de las demás provincias de separarse, entre otros motivos.

• Segundo Imperio Mexicano: el imperio de Maximiliano de Habsburgo, quien estuvo a la cabeza de este gobierno, estuvo vigente desde 1863 hasta 1867. Sus territorios estaban conformados por 50 departamentos, siendo la Ciudad de México su capital.

Este gobierno imperial llegó a su fin debido a la gran oposición que tuvo Maximiliano, cuando el partido republicano, teniendo a Benito Juárez a la cabeza, logró disolver el imperio con el fusilamiento del emperador en el Cerro de las Campanas el 19 de junio de 1967.

Imperio mongol

Este fue considerado el más extenso de la historia, con unos 33 millones de kilómetros cuadrados de extensión, y su origen se remonta al año 1206, culminando en 1368. En este periodo, tuvo tres capitales principales, que fueron Avarga, Karakórum y Pekín. El título del líder de este régimen se le llamó gran khan, siendo el primero Gengis Khan, que estuvo al frente por 21 años, y el último fue Toghan Temur Khan.

Ocupó Mongolia; China; Kazajistán; Uzbekistán; Kirguistán; Tayikistán; las dos Coreas; Afganistán; el sur de Rusia; Irán; Turkmenistán; parte de Pakistán, Iraq, Siria y Turquía, entre otros. Este llegó a su fin debido a varios factores, entre los que destacan que los nómadas que conquistaron los territorios, adoptaron la cultura de los mismos; por la descontinuación del modelo militar; y la inclusión de la pólvora en las batallas, haciendo anticuadas las caballerías, estrategias de lucha mongola.

Imperio bizantino

Tuvo origen en el año 395 d.C., como resultado de la división del Imperio Romano. Este fue el de Oriente, liderado por Teodosio, y logró sobrevivir a los germanos, durando más de mil años, hasta 1453, cuando los otomanos conquistaron Constantinopla, que era la capital de este gobierno. Su extensión territorial estuvo conformada por Italia, Austria, Grecia, Rumania, Bulgaria, Turquía, sur de España, norte de África (Marruecos, Túnez, Libia, Egipto) y otros países de Europa oriental.

Sus gobernantes principales fueron Arcadio, quien gobernó por 13 años, y Constantino XI, que fue el último emperador. Durante este periodo, hubo una fusión entre los griegos y los romanos, en lo que aspectos culturales de ambos pueblos se conservaron.

Imperio español

Este dio inicio hacia finales del siglo XV, con la unión de Castilla y Aragón a través del matrimonio de la reina Isabel I y el rey Fernando II. Se considera que su inicio lo tuvo en 1492, año en el cual, el explorador Cristóbal Colón da con el continente americano, y a partir de ese momento, la conquista de América es un hecho. Su territorio colonizado estuvo conformado por parte de Estados Unidos, México, Centroamérica y casi toda Sudamérica. La bandera del imperio español se llamó cruz de Borgoña, consistió en un fondo blanco con una cruz en rojo.

Su caída tuvo que ver con varios factores, entre los que destacaron las epidemias y los conflictos económicos, sociales y territoriales. La llegada de las tropas napoleónicas a España también hizo lo propio, hasta que en 1824 se disolvió.