El hecho de intimar a alguien quiere decir que se está exigiendo el cumplimiento de alguna petición pero con efecto de autoridad o fuerza, para que se vea en la obligación de cumplirlo. Por tal motivo se siente implícitamente que en la intimación va escondido algún tipo de ultimátum en caso de que no se cumpla lo que se está pidiendo o exigiendo se verán obligados a ejercer acciones (que pueden ser algún tipo de castigo).
La acción de intimar es una facultad que generalmente se le atribuye a aquellas personas con poder legal o autoridad; uno de los tipos de intimación que ellos pueden ejercer es una intimación de pago, el cual es un aviso que se envía generalmente por escrito y donde se expresa una fecha límite, para exigir el pago de algún servicio, producto o impuesto, de no realizar el pago en esa fecha tope se tomaran medidas en su contra (puede ser que se suspenda el servicio prestado, o que se aperture un juicio, entre otras).
Otras maneras en que las autoridades pueden intimar a la población es exigiendo el orden público, ejemplo de esto, solicitando la entrega de armas a aquellos que no tengan permiso de poseerlas, o exigiendo no circular por las calles cuando se tenga toque de queda, etc.