No cabe dudas que la libertad es una facultad que está muy vinculada a otro don tan humano como es el caso del conocimiento. Dicho conocimiento es la luz de la voluntad sobre la cual se establece la libertad. A través del saber, una persona puede reflexionar, recolectar información respecto a un suceso determinado o en su defecto pedir opinión a un amigo antes de decidir sobre algo importante. Por su parte a través del libre albedrío el ser humano puede realizar acciones de bien, en cuyo caso es necesario hacer énfasis que la bondad perfecciona de forma notable el corazón de las personas. Sin embargo, esto no quiere decir que la persona, no pueda realizar una mala acción.
Elegir el bien sobre todas las cosas, es un ejemplo de la responsabilidad ética de aquel ser humano que motivado por su fuerza de voluntad y capacidad de superación tiene la necesidad de crecer como persona.
A pesar de todo lo antes expuesto, es necesario mencionar que la libertad humana tiene límites esto se debe a que la misma se encuentra condicionada a las circunstancias del espacio y el tiempo. Entonces esto quiere decir que ningún ser humano tiene libertad para cambiar los errores cometidos en el pasado, ya que el ayer no se puede modificar. La libertad que un individuo poseer siempre estará relacionada con el poder del ahora como campo de actuación.