El neodarwinismo estableció una serie de bases en las que se asegura que la variabilidad en los genes de una población específicas, se presenta por simple casualidad gracias a la mutación, sin embargo hoy en día se ha demostrados que dicho cambio es responsabilidad de ciertos defectos en el procesos de replicación del ADN, además de ello estableció también que dichos cambios genéticos son provocados por la mezcla de cromosomas producida durante la meiosis. Este planteamiento afirma también que la evolución se presenta principalmente debido a las variables que se producen en la frecuencia de los alelos, con el paso de las generaciones, dando paso a lo que se conoce como deriva genética, el flujo de los genes y posteriormente a la selección natural.
Por su parte en lo que respecta a la especiación, puede presentarse de forma progresiva, cuando un conjunto de individuos se encuentran aislados y no pueden llegar a reproducirse, debido a diferentes factores, como los geográficos e incluso por modificaciones dentro de esa población. La teoría sintética como también se le conoce al neodarwinismo, aseguran que la selección natural y los cambios progresivos, son el principal elemento responsable del proceso evolutivo, descartando de esa forma otras teorías como por ejemplo la ortogénesis, la cual asegura que elementos externos a la materia orgánica son las que conllevan a la evolución de las especies.
Algunos sectores que rechazan al neodarwinismo, argumentan que éste no demuestra de forma contundente ciertos procesos, tal es el caso del intercambio de información genética horizontal entre los organismos procariotas, lo que ha provocado que en ciertos sectores se llegue a dudar de ciertas teorías planteadas por el neodarwinismo.