En el núcleo se encuentra casi toda la masa del átomo, con una pequeña colaboración de la nube de electrones porque los electrones tienen menos peso en comparación con los neutrones y los protones. Los protones y los neutrones se unen para formar el núcleo atómico a través de la fuerza nuclear.
Heisenberg, en 1932, propone que el núcleo está formado por dos tipos de partículas: protones y neutrones (colectivamente llamados nucleones). Los protones tienen una carga positiva e, igual y opuesta a la del electrón, y los neutrones son eléctricamente neutros. Si Z es el número atómico de un elemento, hay electrones Z en la corteza de su átomo y su núcleo tiene N neutrones, donde A = Z + N es el número de nucleones, también llamado número de masa.
- Número atómico Z. Es la cantidad de protones que componen el núcleo del átomo. Por lo tanto, el hidrógeno (símbolo H), que es el átomo utilizado en la fusión nuclear, tiene un número Z = 1, ya que solo tiene un protón en su núcleo. El elemento químico más simple, y al mismo tiempo más abundante en la naturaleza es el hidrógeno.
- Masa atómica A. Es la suma de protones y neutrones. También se llama número masivo. Considerando N: el número de neutrones de un átomo, tenemos que:
A = Z + N.
- Peso atómico. Es el peso del átomo, para calcularlo debemos tomar como unidad la duodécima parte del peso del átomo de carbono (C). Por lo tanto, el hidrógeno pesa aproximadamente 1 y el carbono 12.
- Isótopo. El mismo tipo de átomo puede tener una cantidad diferente de neutrones en su núcleo. Cada variedad se llama isótopo. Por lo tanto, el hidrógeno tiene tres isótopos diferentes: isótopo de hidrógeno, isótopo de deuterio e isótopo de tritio. Estos dos últimos son los usados en la fusión nuclear.
La rama científica que se encarga del estudio y la comprensión del núcleo atómico, incluidas las fuerzas que lo unen y su composición es la física nuclear.