Desde tiempo remotos los seres humanos han dejado ver su interés por oler bien y su inclinación por disfrutar de buenos olores, un ejemplo claro de tal afirmación es que, en Sumeria, hace aproximadamente tres mil años atrás, hay indicios de la fabricación de los primeros perfumes.
Es importantes señalar que en la actualidad el perfume es un elemento muy popular debido al uso diario al que se somete. Esto queda demostrado cuando un individuo se termina de cambiar de ropa, ya sea para salir, para trabajar o para realizar cualquier otro tipo de actividad, cualquiera sea el caso tanto hombres como mujeres, se suelen colocar al menos unas gotas de perfume en diversas partes del cuerpo, como por ejemplo detrás de las orejas, en las muñecas, con el objetivo de oler mejor y gozar de una mejor presencia ante la mirada de quienes los rodean.
Cabe acotar que aparte del típico perfume que las personas suelen utilizar para dar olor a su cuerpo, existen también perfumes para ambientes, para los automóviles y para la ropa, que, a pesar de presentar ciertas diferencias, tienen claro la misma misión que el perfume corporal: es decir aportar un aroma híper agradable al espacio o prenda en las cuales se aplican.
En la actualidad es verdaderamente impresionante la inmensa oferta de perfumes que hay en el mercado y sin hacer mención a lo fantástica que se ha vuelto la industria de la perfumería motivado a la gran variedad de estas sustancias. A las ya populares marcas clásicas de perfumes se le han sumado entre sus competidores las estrellas de la música o del mundo de la interpretación, los cuales suelen lanzar a la venta sus propias líneas de perfumes que por lo general suelen llevar el nombre de la figura en cuestión.
