La pintura en la antigua Grecia era utilizada frecuentemente para decorar cualquier clase de estructuras, ya sean de tipo civil, religioso o fúnebre., de igual manera se pintaban las ropas y el cabello que presentaban las esculturas.
Según los conocedores de la historia, las pinturas que realmente tuvieron valor en esa época fueron las hechas en tabla, sin embargo, debido a que la madera es un material que se desgasta con el tiempo, en la actualidad no se cuentan con ningún trabajo realizado en este material, para ser estudiado, sólo se han conservado alguna que otra tablilla funeraria, halladas en Egipto y las cuales son apreciadas como una prolongación de la tradición pictórica Greco-romana.
El origen de la pintura Griega se mantuvo vinculado con las formas geométricas y estuvo profundamente influenciada por el arte Sirio y egipcio. Aun cuando se conservó, el dominio del dibujo y la línea en la pintura, también se creó una identidad y unos rasgos propios.
Entre las bases que más se usaron en la pintura griega se pueden señalar: paredes, las láminas de madera y las losas de mármol. Sin embargo, la base que más se empleo fue la tabla de madera.
En cuanto a la gama de colores que los artistas griegos seleccionaban con frecuencia, se encuentran: el amarillo, el blanco, el azul, el rojo, el negro, el púrpura, el verde y el marrón.
Los pintores griegos se distinguieron por expresar en sus obras figuras de escenas mitológicas, batallas históricas y leyendas. El retrato, la caricatura y motivos enfocados en la naturaleza fueron desarrollándose y con el tiempo lograron obtener mucha importancia. De igual manera se pintaron situaciones cotidianas de los individuos de esa época.