Esta expresión es aplicada para todos los educadores de los distintos niveles de la educación, infantil, primaria, secundaria y en la educación superior universitaria. Para ejercitar la profesión de profesor debe tener habilidades y conocimientos pedagógicos que son los que le permitirá al profesor poder desempeñar esta ocupación, ya que cualquier desarrollo de educación significa el tener que demostrar sus condiciones socio culturales.
Un profesor, en definitiva, admite que la enseñanza es su ocupación y profesión principal. Por consiguiente, sus destrezas consisten en instruir de la mejor manera posible a quienes toman el rol de estudiante, sin importar la edad o condición que el mismo tenga.
La enseñanza, entendida como educación, es una función realizada a través de la participación de tres sectores: el profesor, sus estudiantes y el centro de conocimiento. Una idea teórica e idealista cree que el profesor tiene el deber de trasladar su discernimiento al alumno a través numerosos elementos, recursos, metodologías y herramientas de apoyo. Igualmente, el profesor ocupa el rol de fuente de sapiencias y el alumno se convierte en un aceptador ilimitado de todo ese conocimiento. En los tiempos actuales, este proceso es estimado como más recíproco y. dinámico.
Todo profesor debe ser muy consciente del gran compromiso y de responsabilidad que posee de manera individual y a nivel social, debe mostrarse conforme con el papel que desempeña como centro de transformación de sociedades y de generaciones, ya después de haber comprendido cuál es su compromiso podrá visualizar de manera clara cuáles son las funciones que tiene que cumplir para lograr construir personas más reflexivas, críticas, humanas y más responsables.
