Mientras tanto, las aves de rapiña son aquellas aves que cazan su alimento a través de su pico curvo, de aspecto duro que termina en puntas y especialmente sus garras, muy, pero muy agudas, serán las que cumplen la función de presa en sus capturas.
Aves de presa se distinguen a menudo en aves de rapiña de día y aves nocturnas de rapiña. Entre los diurnos destacan: águila, águila pescadora, azores, halcones, buitres del viejo mundo, halcones, alcotanes, cernícalos, sirenas, secretarios y buitres del nuevo mundo; y entre los nocturnos: los búhos, los búhos y los búhos.
La cetrería es la denominación formal que recibe la caza a través de las aves depredadoras. Lo anterior es una actividad que se desarrolló hace miles de años, aproximadamente 4 mil aproximadamente y era muy común durante la Edad Media. Luego, disminuyó gradualmente, desapareciendo directamente en el siglo XVII. Mientras tanto, el ecologista español Félix Rodríguez de la Fuente fue el promotor moderno de esta actividad, además de ser el principal experto mundial en aves de rapiña.
Además de lo anterior, no podemos pasar por alto el hecho de que, como regla general, las aves de rapiña se dividen en dos grupos principales:
– Los nocturnos o estrigiformes, que son grandes cazadores, muy solitarios y que, como su propio nombre indica, realizan actividades nocturnas. Pueden alimentarse de otras aves, pequeños mamíferos, insectos e incluso peces. Dentro de este grupo, a su vez, hay dos tipos: el estricto, como los búhos, que están formados por hasta doscientas especies diferentes y que comen invertebrados o pequeños invertebrados; y titonids, tales como búhos.