Cuando se sufre del alejamiento, se vuelven mucho más sensibles a posibles rechazos. Según Abraham Maslow, uno de los fundadores de la psicología humana, dice que todos los seres humanos seres humanos necesitan dar y recibir afecto, para que haya un balance y una psicología saludable. Pueden presentar síntomas de introversión, como lo pueden ser: escasos deseos de compartir con los demás, inmadurez, agresividad en exceso, impulsivos, ansiedad social, entre otros.
En los niños pequeños, inclusive, un simple juego de arrojar la pelota, puede causar efectos negativos, rabia y tristeza, pues, después de unas cuantas rondas y se deja pasar la pelota a alguien, la persona siente grandes sentimientos de exclusión. Distintas situaciones y lugares se prestan para la exclusión que se pueda dar en el ámbito social, sin embargo, cuando el sujeto que sufre del rechazo es finalmente aceptado, no siempre son capaces de superar los diferentes problemas que adquirió debido a los continuos repudios sociales, por lo que la ayuda por parte de un psicólogo está recomendada.