En la historia han existido casos de sistemas de recompensa, aquellos en las que se les otorgaba un incentivo a aquellos que se unieran a ciertos grupos. Entre estos destacan el empleado en la Guerra Civil de los Estado Unidos, llevado a cabo con el fin de aumentar los alistamientos, y aquél en Nueva Gales del Sur, en donde pagaban a personas para que se mudasen allí. En la época actual, el uso de las recompensas no se encuentra tan extendido, debido a las mejoras tecnológicas y de la implementación de nuevas técnicas de investigación policíaca.
A partir de las recompensas, surgieron los caza-recompensas, una suerte de investigadores personales que sólo buscan resolver enigmas para cobrar el dinero que se otorga por ello. Por otro lado, se pueden hallar las recompensas militares, aquellas que se ganan los militares por sus años de servicio y las hazañas logradas durante su estancia en el ejército.