De acuerdo a usos históricos del término, la redención se ha empleado para hablar sobre la abolición de la esclavitud. En épocas en la que este sistema aún se encontraba vigente, los esclavos podían comprar su libertad pagando cierta suma de dinero o cumpliendo con ciertos años de trabajo; en algunas ocasiones, otras personas se encargaban de saldar esta deuda. Cabe destacar que, también gracias a estas acciones, se considera que la redención es igualmente un proceso en el que a una persona se le libera del sufrimiento, de cargas pesadas o del dolor.
En el cristianismo, se tiene como redención aquél acto en el que Jesús se sacrificó por los humanos, en un intento por salvarlos de la muerte y dejarles libre acceso al cielo. De acuerdo al concepto original, la muerte del mesías sería el pago, reclamado por Dios, para librar a la humanidad de un terrible destino. Pronto, la religión giraría en torno a este hecho, que había sido previsto, según lo explicado en la biblia, por varios profetas.