Los veredictos son de varios tipos, a saber, privados y públicos, generales, parciales y especiales.
Un veredicto secreto es uno entregado en secreto a un juez fuera de la corte. Un veredicto de este tipo es entregado al juez después de que el jurado ha acordado, para la conveniencia del jurado, que después de haberlo dado.
Un veredicto público es emitido en audiencia pública. Este veredicto tiene todo su efecto, y a menos que sea apartado es concluyente sobre los hechos y cuando se dicta sentencia sobre él. Un veredicto privado debe luego ser dado públicamente para darle cualquier efecto.
Un veredicto general es aquel por el cual el jurado se pronuncia al mismo tiempo sobre el hecho y la ley, ya sea a favor del demandante o del acusado. El jurado puede encontrar tal veredicto cuando lo crea conveniente.
Un veredicto parcial en una causa penal es aquel por el cual el jurado absuelve al acusado de una parte de la acusación contra él y lo encuentra culpable del residuo: los siguientes son ejemplos de este tipo de veredicto, a saber: cuando absuelven el acusado de un cargo y encontrarlo culpable en otro, que es de hecho una especie de veredicto general; cuando la acusación es de ofensa de grado superior, e incluye una de grado inferior, el jurado puede condenar a los menos atroces al encontrar un veredicto parcial. Así, en una acusación por robo, el acusado puede ser declarado culpable de robo y absuelto de la entrada nocturna; En una acusación por asesinato, puede ser condenado por homicidio; el robo puede ser ablandado al hurto simple; una batería, en un asalto común.
