La aplicación del razonamiento, le permitirá a la persona llevar a buen término algún planteamiento, que a simple vista pareciera complicado y fuera de todo entendimiento, sin embargo, las personas deben aprender a zanjar este tipo de inconvenientes, pensando alternativas viables que pongan punto final a esos conflictos.
Antes de zanjar dificultades, lo primero en tener en cuenta es, identificar el inconveniente en cuestión, ya que si se ignora la existencia de la contrariedad o no se determina con exactitud, no existirá la necesidad de zanjar. Una vez que se identifique el problema, es necesario elaborar una planificación que permita la creación de acciones que conlleven a la solución de dicho problema. Por ejemplo el gobierno de un país puede sugerir, que para solucionar el problema de la inseguridad y la pobreza, es necesario la aplicación de políticas que brinden asistencia directa a los sectores más desvalidos, a través de la creación de fuentes de trabajo, mejoramiento de los organismos de seguridad, fomentando la inversión privada, combatiendo la inflación, etc. Claro está, que esto solo se podría cumplir a largo plazo; pero que sin duda ayudarían a resolver tantos problemas que aquejan a muchos en países en la actualidad.
Es muy importante resaltar que para zanjar conflictos no es necesario aplicar la violencia, es necesario que las personas aprendan a resolver los conflictos de una manera más razonable, aplicando siempre el diálogo antes que la fuerza.