El proceso de la conciliación bancaria se realiza a través del “libro auxiliar” que es donde la empresa registra todos sus movimientos, lo mismo hacen las entidades bancarias, quienes mensualmente se encargan de enviar a sus clientes un estado de cuenta detallado, en donde se muestran todos los movimientos realizados por dicha organización, posteriormente se procede a verificar que todos los datos suministrados por el banco coincidan con los que la empresa ha registrado en el libro, de no ser así se analiza cuál fue el motivo de la diferencia.
Generalmente los extractos suministrados por lo bancos no coinciden con los plasmados en el libro contable de la empresa, esto ocurre por las diferencias de tiempo en las que son registrados los movimientos, ya que puede suceder que una empresa determinada realizó movimientos económicos, tales movimientos fueron registrados ya en el libro diario, mientra que en el banco no se ha registrado aún ya que eso es contabilizado semanalmente y de allí que los datos no coincidan.
Algunas de las causas más comunes que se presentan al momento de hacer la conciliación son los cheques emitidos por la empresa, que no han sido cobrados por quien recibió dicho cheque. Notas de crédito que el banco ya registró en el balance pero que la empresa no lo ha hecho aún. Errores al momento de plasmar los valores y conceptos en el libro contable, el banco también puede presentar errores de este tipo.
Al momento de realizar la comparación entre los datos que posee la empresa y lo del banco, siempre se recomienda utilizar como punto de referencia los emitidos por el banco ya que son cifras oficiales, por ello se consideran más confiables.