Este metal posee un color blanco plateado, se caracteriza por ser totalmente dúctil y maleable, su estado más encontrado es oxidado (Gd2O3) siendo fuertemente magnético para el hierro cuando presente una temperatura baja, su obtención se logra principalmente a partir de la arena monacita. Este elemento puede ser utilizado para la fabricación de barras de control en los reactores nucleares, debido a su amplia capacidad de captar numerosos neutrones de carácter térmico, sin embargo los isotopos idóneos para este trabajo son el gadolinio 155, gadolinio 157 y estos no se encuentran en abundantes cantidades siendo la principal razón de que los controles no tengan una energía duradera.
Otro uso que se puede anexar a este elemento es en la construcción de microondas, el gadolinio en combinación con el itirio forman granates que al ser irradiados por un haz de luz emitirán rayos con altos valores térmicos. En igualdad con los compuestos de su mismo grupo, el gadolinio puede ser empleado para la elaboración de pantallas de televisores. El gadolinio también es empleado para las radiografías corporales de contraste, este compuesto químico al ser inoculado por vía endovenosa permite un mejor apreciación de las imágenes cuando se realizan resonancias magnéticas, sobre todo en la observación de áreas como: el tracto gastrointestinal, vasos sanguíneos en general (arterias y venas), tejidos blandos como músculos, grasa y piel., también se puede observar tejido cerebral y glándulas mamarias.
Al igual que todos los grupos lantánidos, los principales órganos que pueden ser afectados por este elemento es el sistema respiratorio y tejidos internos como el hígado, a nivel ambiental puede afectar principalmente a los animales acuáticos y produce afecciones en el suelo, lo que llevara a aumentar la concentración de este elemento en el humano cuando entre en contacto con ambos ambientes.
