El sexólogo Roberto Soto y Ramírez, manifiesta que el rendimiento sexual de un hombre puede variar dependiendo de su estado de salud, de su edad y estado físico, sin embargo se alcanzan establecer ciertas etapas de su vida sexual en los que se armoniza en determinadas características. Probablemente, revela el especialista, esto se deba a que su confianza cambia o su vida se transforma a medida que los hijos crecen; al mismo tiempo, porque conocen mejor su sexualidad. Los hombres por otra parte participan sentirse mucho más felices con su pareja si ésta es muy cariñosa, lo que aparenta favorecer a un mejor desempeño sexual. Por su consecuencias e importancia dentro de una estable relación de pareja
Es considerado que a los 20 años es la etapa de mayor rendimiento sexual de los hombres debido a su alta libido y energía. Si aún existen ciertos prejuicios, ya que desean disfrutar la mayor cantidad de experiencias, al mismo tiempo es una etapa con más fantasías sexuales. Son expuestos a la ansiedad sexual y a la eyaculación precoz por causas psicológicas; y por tanto, su rendimiento sexual es extenso y vigoroso.
A partir de los 30 años ya están más conectados a sus experiencias y actividad sexual, ya no se trata de frecuencia, sino de la calidad y su importancia. El apetito sexual comienza a decaer, por lo que su rendimiento está conducido de muchos más preludio y juegos. Gozan tanto de la seducción, como de la intimidad. Debido a sus actividades diarias, la asiduidad de las relaciones también se reduce.
Los hombres de 40 años en adelante debido a su conocimiento y mayor experiencia, disfruta del hecho de complacer mucho más a las mujeres y de gozar con mayor intensidad en la intimidad. No le da miedo el experimentar, por lo que está dispuesto a nuevas experiencias, aunque el apetito sexual disminuye más, así como también la frecuencia de la actividad.