La subcontratación puede contratar sólo al personal, pero los bienes, los aportará el consumidor y las instalaciones de “hardware y software” o también pueden contratar tanto el personal como los recursos. Por otro lado se puede decir que la empresa subcontratada debe pagar parte del control administrativo y operacional de la empresa, de manera que la empresa pueda hacer su labor apartada de los vínculos normales de la empresa subcontratante y sus consumidores. Esto también comprende un considerable grado de intercambio bidireccional de información, coordinación y confianza.
Las organizaciones que le brindan estos servicios piensan que la subcontratación solicita la cesión de la responsabilidad corporativa para así poder tramitar una proporción del negocio. En la hipótesis la proporción no debería ser crítica para el funcionamiento de la empresa pero en el ejercicio indica lo contrario. Las entidades contratan a las empresas especializadas en la subcontratación para así encargar la administración de la extensión más propicia a ello.
En esta área se pueden encontrar la subcontratación de informática, los recursos humanos, la administración de activos e inmuebles y contabilidad. Debido a que las empresas también subcontratan el soporte técnico al beneficiario y el trámite de las llamadas telefónicas, manufactura e ingeniería. Pero además se caracteriza por la especialización no interna al núcleo de la organización contratante.