Su mecanismo de acción no se ha determinado oficialmente, sólo han aparecido una serie de teorías de cómo podría prevenir la desinflamación; lo que sí se sabe sobre él, es su mecanismo primario, por el cual es capaz de reducir los dolores y la inflamación, consistiendo esto en la desactivación de la enzima ciclooxigenasa (COX), algo que también podría colaborar en los efectos posteriores. Puede llegar a disminuir la síntesis de prostaglandinas en el estómago, lo que hace que los ácidos gástricos actúan con bastante agresividad en las paredes de esta, creando úlceras en este órgano.
La metabolización de este medicamento se da en el hígado y durante su excreción, casi ninguna de los restos que salen están inalterados, es decir, los que si pasan por esta etapa se quedan dentro del organismo y se quedan por unas semanas o meses. La orina e uno de los medios por los que se puede expulsar este fármaco, al igual que la bilis. No afecta de ninguna forma los riñones, ya que esta no es una vía de desintegración; por esta razón no es necesario adaptar la dosis máxima si un paciente padece esta enfermedad.