Un contrato laboral, indica a cada una de las partes (empleado y empleador) cuales son las funciones de este dentro de la empresa donde ejercerá la labor que se le sea asignada. Al empleado se le deja por escrito en este, cuales son las funciones que este debe desempeñar, cuales son las herramientas que debe utilizar, el horario en el que debe laborar y las condiciones bajo las cuales ejecutara la acción. EL contrato por su parte también debe especificar cuáles son los beneficios que el empleador debe cumplir con el trabajador, haciendo hincapié en el salario que recibirá, los beneficios de seguros sociales que tendrá, los derechos que tiene el trabajador dentro de la empresa y las condiciones bajo las cuales el empleado se sienta seguro y respetado. Existen leyes en muchos países que regulan los estatutos bajo los cuales los contratos laborales se celebran, a fin de otorgar a cada una de las partes una justa remuneración y servicio prestado.
Los convenios en forma de contrato por lo general ir firmados con una rúbrica de todos los involucrados, en algunos casos, poseen sellos en los que se evidencian membresías y códigos de aceptación por parte de entes superiores. Todo esto con el fin de establecer la legalidad y dar a entender que las partes interesadas están de acuerdo con todo lo estipulado en el contrato.