Es común que este domicilio sea un requisito exigido por muchos tramites en cualquier país. Entonces, al existir un documento matrimonial los firmantes como esposo y esposa establecen un lugar de residencia y domicilio en conjunto que se traduce como aquel lugar en el que llevan todas las actividades de esa unión estable de hecho o derecho. Ambas partes deben estar de acuerdo en fijar el espacio para vivir juntos, y de igual modo si deciden mudarse de ese domicilio debe ser aprobado por ambos.
El domicilio conyugal es aquel espacio físico donde residen los esposos y los hijos (cuando hayan) por ello también es llamado vivienda familiar u hogar. Sin embargo se debe tener en cuenta que para poder decir que existe domicilio conyugal, los cónyuges deben gozar de plena autoridad sobre la vivienda, es decir no puede ser un espacio compartido con otra familia (bien sea padre de los cónyuges, familia de los mismos o un tercero), sin embargo esto no quiere decir que debe pertenecer a ellos, puede ser una casa alquilada.
Antiguamente podía ser impuesto por el esposo (hombre) por ser considerado el padre de familia y era quien tenía la autoridad de decidir los diferentes ámbitos correspondientes al matrimonio y la esposa lo obedecía, ahora con la reinvención de los derechos de las mujeres, es entre los dos que se define el carácter de un domicilio conyugal. De producirse un divorcio en el matrimonio dejará de existir el domicilio conyugal y será un abogado o un juez quien indique que pasara con la vivienda, ya que todos los casos de divorcios no son iguales.
