Los explosivos pueden dividirse según la velocidad de la reacción de la explosión en bajos y altos, siendo los primeros sustancias químicas que se descomponen rápidamente pero sin llegar a detonar y las segundas hacen referencia a su extremada rapidez para descomponerse y que se denomina detonación y estos a su vez se subdividen en indiciadores, son sensibles al choque y al calor; multiplicadores, para los cuales su sensibilidad se encuentra entre los iniciadores y los detonantes que comprenden los explosivos.
Y por su naturaleza química se dividen en orgánicos, los cuales se activan mediante un iniciador o cebo y su manipulación es segura; inorgánicos, son directamente explosivos y son componentes de la pólvora y los organometálicos se usan como iniciadores de otros explosivos, tienen carácter de detonante y basta un choque o rose para su descomposición. Estas sustancias en la minería también se usan para romper, destruir o debilitar materiales de gran dureza, normalmente rocas. Los explosivos han llegado a ser motivos de grandes accidentes y muertes en el mundo.