Al igual que el caucho, la gutapercha es un polímero, sin embargo se diferencian debido a que la gutapercha es un isómero trans, lo que la hace menos flexible, otra diferencia bastante significativa es el peso molecular siendo la del caucho mayor a 100 mil mientras que el de la gutapercha es apenas de 7 mil.
Antes de que la gutapercha fuera exportada al Inglaterra y antes de que se convirtiera en lo que fue, era utilizada por los pueblos oriundos del archipiélago malayo, con el fin de elaborar los mango para cierta herramientas, posteriormente John Tradescant fue quien sacó a la luz al material mientras realizaba un viaje hacia el lejano oriente, donde terminaría topándose con la gutapercha en el año 1656, otorgándole el nombre de “madera Mazer”, pero no fue sino William Montgomerie (soldado médico) quien le dio usos bastante prácticos en el área de la medicina, lo que le permitió que se le otorgara la medalla de oro por parte de la Real Sociedad para el fomento de las Artes.
En Inglaterra fue muy utilizado este material, empleándolo en diferentes áreas, tanto en la rama industrial como en la doméstica, uno de las tantas aplicaciones para las cuales se utilizó la gutapercha, fue como un aislante para los cables que hacían posible la comunicación con el telégrafo, ya que los mismo se encontraban bajo el agua, la explotación de este material fue tal que provocó una sobreexplotación del mismo a tal punto de ser prácticamente insostenible conduciendo hacia un derrumbe de la oferta del mismo.