Por los momentos es sola una moda, pero los medios de comunicación que se encargan de la materia sexual (muy rentable por estos días) la han catalogado como la moda antónima a la que usan los metrosexuales, porque sus fundamentos son completamente contrarios. Recordemos que los metrosexuales son aquellos que visten limpiamente y a la última tendencia de la moda.
Todo indica que los hombre lumbersexuales resultan atractivos a las mujeres por su condición rústica y varonil, lejos de las características artificiales de un hombre de ciudad que se preocupa del cuidado de su piel y vestir como lo hacen las mujeres. Los hombres lumbersexuales demuestran a la femenina una actitud machista y agresiva, que puede tornarse sensual para aquellas mujeres que se han apartado de la condición varonil de un hombre por estar en ambientes en los que la identidad es el buen vestir y el cuidado personal. Del mismo modo, los medios han reseñado que este tipo de sujeto masculino y con porte viril muestra una faceta más sencilla y humana, que lo aleja de intereses monetarios y lujos.
Hoy en día en la sociedad con el levantamiento de los tabúes que restringían a la sociedad y el libertinaje de las diferentes culturas que se han dedicado a mostrar mucha más piel que el siglo pasado, ha surgido una serie de conductas sexuales que van de la mano con las tendencias de moda que se vuelven virales en las redes sociales a partir de imágenes de famosos o situaciones o acontecimientos.