Qué es monarquía
El concepto de monarquía lo describe como una dinastía en la cual una persona da la cara por todo un territorio desde edades tempranas hasta el momento de su muerte. Solo un heredero directo (y legítimo) de ese monarca puede tomar su lugar en el trono.
Los poderes políticos del monarca pueden llegar a ser variados, partiendo desde un acto simbólico conocido como monarquía parlamentaria, tener poderes ejecutivos con restricciones como la monarquía constitucional o simplemente ser autocrático, tal como la monarquía absoluta. También está la figura de monarquía híbrida. Todas estas serán explicadas más adelante.
Las monarquías funcionan de manera hereditaria, es decir, el puesto de mayor orden es vitalicio, quien lo ejerce, hace el cese de sus funciones cuando muere, inmediatamente es suplantado por el siguiente en la cadena.
En la actualidad son pocos los sistemas de gobiernos monárquicos que se mantienen en pie, sin embargo, los que quedan, funcionan a la par con gobiernos democráticos y sirven de complemento en las funciones directas e importantes de la nación.
En las monarquías, el jefe de estado puede verse de 3 maneras diferentes, la primera es la personal y unipersonal, sin embargo, en la historia se han registrado casos como:
- Diarquías: Con dos personas al mando de un territorio determinado.
- Triunviratos: 3 mandatarios aliados.
- Tetrarquías: 4 sujetos que comparten el poder de una misma nación.
- Regencias.
Estas últimas son las más comunes en caso de que el mandatario o heredero tenga menor edad o tenga alguna incapacidad.
La segunda forma en la que se presenta un jefe de estado o monarca es la vitalicia, aquella en la cual el cargo se designa en orden de herederos. En este caso, también se puede ver la figura de las magistraturas con tiempo limitado, teniendo así funciones similares a la de una monarquía vitalicia. Acá también se puede ver la abdicación (renuncia o cese del cargo) derrocamiento o el regicidio.
Por último, está la designación, en la cual se escoge al monarca de acuerdo a su legitimidad como heredero al trono, por cooptación (llenar las vacantes) o por selectividad. Las monarquías se mantienen a flote para preservar ciertas tradiciones de las naciones monárquicas, además, resulta más sencillo tomar una decisión o llegar a acuerdos a través de las monarquías, que de una República o de otros tipos de gobiernos.
Etimológicamente, el termino nace del latín «monarchĭa», que significa forma de gobierno. Existe una definición de monarquía en la cual el término en griego es denominado mónos (uno) y arkhein (mandar, gobernar, regir, ordenar). Juntos, significa un solo gobierno, mandato o un solo líder.
Tipos de monarquía
La mayoría de las hipótesis políticas mencionan que las monarquías se subdividen en 3 tipos importantes para gobernar. Todas ellas tienen elementos diferentes, a pesar de conservar la característica esencial para ser una monarquía.
Monarquía absoluta
En esta vertiente se habla de un monarca que no posee ningún tipo de restricción en su forma de gobierno, incluso puede actuar en temas religiosos sin que nadie, ni siquiera el vaticano (máximo líder en la religión cristiana) pueda negarse.
En las monarquías absolutas, el jefe de estado es la representación máxima de la nación, no existe una división de poderes, no hay personas que encabecen los sistemas de gobierno regional o estatal, es el monarca el único encargado de llevar el frente de las políticas del país.
Monarquía constitucional
En este tipo existe una separación de poderes establecida y respetada por toda la nación. El monarca lleva a cabo las funciones del poder ejecutivo a cabalidad, pero el poder legislativo es ejercido por una parlamento o asamblea nacional previamente escogida (o electa) por los ciudadanos de la nación.
En este tipo de monarquías, el monarca ejerce, posee y mantiene las funciones ejecutivas del país que gobierna, nadie más puede ostentar el cargo o intervenir en las decisiones que este exteriorice.
Monarquía parlamentaria
De todos los tipos, esta es la más compleja. Esto se debe a que, citando la frase de Adolphe Thiers, el rey reina, mas no gobierna. En estas monarquías el monarca ejerce el poder ejecutivo siguiendo las reglas (y órdenes) del poder ejecutivo.
Son los parlamentarios los que llevan el control de la nación, son los que toman las decisiones políticas del país y las ejecutan a través del monarca. Todas las normas que ellos mismos hayan establecido, van a regular las actuaciones de los civiles en todo el territorio nacional y, por consiguiente, del rey.
Monarquía híbrida
En la historia se han registrado infinidades de monarquías, algunas fueron absolutas, otras constitucionales y otras más que tenían características compartidas. En la actualidad, existen dos monarquías híbridas que mantienen el poder con total éxitos, estas se dan en Liechtenstein y Mónaco. En ambos territorios reinan las monarquías constitucionales y parlamentarias sin problemas, de hecho, en Liechtenstein, el rey tiene incluso más poderes que el parlamento y tiene la capacidad de disolverlo en cualquier momento.
En el caso de Mónaco, la persona que lleva el poder de la nación es el Príncipe Alberto II de Mónaco, el cual sucedió a su padre luego de su muerte en el año 2005.
Las monarquías más importantes de la actualidad
Aunque la sociedad ha avanzado muchísimo con el paso de los años, aún siguen existiendo algunas monarquías, claro, no han sido tan violentas como lo que un día fue la monarquía romana, pero mantienen esa característica de realeza que más de una persona ha visto en las películas o que ha leído en más de un libro de historia. Algunas de las más importantes son:
Monarquía inglesa
Representa una de las monarquías constitucionales más antiguas de la historia. El mandatario de Inglaterra no solo es rey del territorio británico, sino también del Reino Unido y de los territorios británicos que se encuentren en ultramar, así como de otros 15 países que una vez formaron parte del imperio británico y que ahora son conocidos como los Reinos de la Mancomunidad Británica de Naciones.
Actualmente, la monarca de la corona británica es Isabell II, la cual tomó el poder de las naciones en 1952.
Al ser una monarquía compartida, en los casos de sucesión, esta se basa en los hijos primogénitos que, preferiblemente deben ser de género masculino, sin embargo, a falta de un hijo varón, una mujer puede ostentar el cargo de reina de la nación sin ningún problema.
Monarquía española
Se trata de una figura de gobierno de tipo parlamentaria tan antigua como la corona británica. Este tipo de gobierno se consolidó gracias a la unión sentimental (matrimonio) de la Reina Isabel I de Castilla con Fernando II de Aragón. La religión que se practica en todo el territorio español es la católica.
La monarquía del Vaticano
Esta es la segunda monarquía absoluta existente en la actualidad. El Monarca es denominado como «Papa» y su sede de gobierno se encuentran en la ciudad del Vaticano, en Roma. Su actual monarca es el Papa Francisco.
El vaticano es considerado uno de los reinos más pequeños del mundo, pero también es el más poderoso, pues representa el catolicismo de todo el mundo. La santa sede representa la fe de más de 70% de la humanidad.
El Papa es electo mediante el sufragio de únicamente 80 cardenales que, por cierto, deben tener una edad determinada (ser menores de 80 años).
Nadie más tiene la facultad de votar o elegir al próximo monarca del vaticano, además, no es un reinado vitalicio o hereditario.
Otro aspecto importante del monarca del Vaticano, es que no importa su nacionalidad, de hecho, el Papa Francisco es de nacionalidad argentina y su secretario de Estado (Pietro Parolin) es italiano.
En el caso de renuncia del cargo como sumo pontífice del Vaticano o, en su defecto, su muerte, el poder recae en el colegio de Cardenales, quienes deberán votar, más adelante, para la elección de un nuevo Papa.
El monarca del Vaticano es quien dicta las leyes, ejerce el poder ejecutivo y el judicial, así que todos deben obedecerle (a nivel nacional e internacional).
El imperio de Brunéi
Se trató de un imperio perteneciente al Sur de Asia, fue fundado a principios del siglo VII, considerado un reino pequeño, marítimo y comercial cuyo rey podía ser pagano, hindú o nativo.
Más adelante, en el siglo XV, los reyes de Brunéi tomaron la fiel e inequívoca decisión de unirse al islam y cumplir con las reglas y mandatos que le caracterizan.
Actualmente, Brunéi es una monarquía absoluta, con leyes algo arcaicas considerando que se vive el siglo XXI, pero esto es motivado a la religión que escogieron vivir y a sus costumbres.
Diferencias entre república y monarquía
Desde los comienzos de la sociedad y la historia, se han desarrollado diversidad de gobiernos en todo el planeta, siendo la república y la monarquía las dos formas más comunes y duraderas en varios territorios.
Republica:
- Un grupo de personas escogidas democrática y popularmente por el pueblo, son las que gobiernan una nación. Esto se hace mediante el voto, ejerciendo así su soberanía. Esto quiere decir que, el poder, realmente recae es en la población de ese mismo país.
- Existe la figura del presidente.
- La presidencia de la república tiene un tiempo determinado y, vencido ese lapso, se deben convocar las elecciones pertinentes.
Monarquia:
- El poder recae únicamente en el monarca.
- Su mandato es vitalicio.
- Los poderes están totalmente centralizados y comandados en una sola persona.