Qué es mortalidad
Tal como se mencionó con anterioridad, el término puede interpretarse como la condición que tienen los seres vivos en la cual su final verídico es la muerte, pero también puede definirse como un índice de mortalidad, es decir, hace alusión a todas aquellas defunciones producidas en un determinado territorio bajo diversos lapsos de tiempo.
De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud, el término hace referencia directa al número y las causas de muerte que se han producido en un lugar en un tiempo específico, pero también lo clasifica en dos vertientes.
La primera es la muerte por situaciones endógenas, es decir, las que han sido producto o resultado de condiciones genéticas, congénitas, enfermedades autoinmunes o el envejecimiento. La segunda tiene que ver con las causas exógenas, es decir, las que tienen conexión con factores externos a la persona, ejemplo, las infecciones, parásitos, violencia, accidentes o inanición, dejando en claro que la mortalidad y morbilidad van de la mano.
Etimológicamente hablando, el término viene del latín mortalitas atis, lo cual se relaciona con el acto de morir. También viene mortis, que significa muerte.
Tasa de mortalidad
De un modo más específico, la tasa de fallecidos es un indicador que muestra la proporción de personas muertas en una población, normalmente este es un estudio que se hace de país en país y el periodo de tiempo que se considera es de doce meses, es decir, un año.
Para su cálculo es necesario contar con el número de muertes ocurridas en una población durante un año, dividirla entre la población total y el resultado multiplicarlo por 1000.
Su fin básico es mostrar una especie de comparación en la cual se refleje el número de personas fallecidas por cada mil habitantes de dicha localidad y, de ese modo, se pueda conocer la cantidad de personas muertas.
Este es un número que se expresa en porcentaje (tanto por mil, ‰), para indicar un aproximado acerca de la situación de muertes en un país y así poder llevar un control y a la vez determinar cuáles son las causa de muertes en esa zona e indicar cuál es la que tiene un mayor número en su contador, por ejemplo se revelan si las personas mueren por causas naturales, accidentes o si es por homicidios.
Tasa de mortalidad bruta
Es la que se explicó anteriormente, en donde se incluyen a todas las personas muertas en un año en un país. Por ejemplo, la tasa de mortalidad en México para el año 2017 fue de 6,01% de muertes por cada mil ciudadanos.
Tasa de mortalidad específica
Se refiere a la cantidad de individuos que mueren por una causa determinada, lo que indica que existe una tasa de fallecidos específica para muertes por cáncer,una para las que son por diabetes, otra por infartos, accidentes, mortalidad materna, homicidios y así sucesivamente, este tipo de índice también se puede demostrar por edades en las que fallecen las personas de igual modo esta también se realiza por año y país. La tasa de mortalidad en méxico en el 2017 por cáncer fue de 442,4 por cada 100 mil habitantes.
Mortalidad infantil
Es una variable demográfica de natalidad y mortalidad que indica el número de niños menores de un año de edad fallecidos a lo largo de un periodo de tiempo determinado.
Por lo general, esta es expresada como tasa o índice, y es aquella que da la proporción existente entre el número de niños menores de un año fallecidos en el curso de un año y el número de nacimientos vivos durante el mismo año. Se expresa en tanto por ciento o tanto por mil, y se agrupa por edad o meses de nacimiento, sexo, localidad o país, o grupo social.
Neonatal precoz
Abarca desde el nacimiento hasta la primera semana de vida.
Neonatal
Se enfoca en los bebés solo hasta el primer mes de vida.
Postneonatal
Desde el nacimiento hasta un año de edad. Aunque la tasa infantil se mide sobre los niños menores de 1 año, también se ha medido algunas veces en niños menores de 5 o 9 años, esta categoría que abarca a niños mayores de un año, se llama infantil.
Mortalidad en el mundo
Hoy en día los índices de fallecidos son elevados en los países de menos recursos (más enfermedades, débil estructura sanitaria, poca higiene, mala alimentación), y son mínimos en los países desarrollados (mayores posibilidades tecnológicas y mayor bienestar social).
La muerte infantil en los países desarrollados suele ser muy baja; en el 2008, fue del 6,2% en E.E.U.U. y del 3,9% en Alemania.
En cambio los países subdesarrollados siguen presentando tasas muy elevadas, como en los casos de Haití con 60%, de Bolivia con 45%, y de la gran mayoría de los países africanos, en donde supera los 100 por mil; por ejemplo, Níger con 116,6% y Angola con 180% (registrada como la peor del mundo).
Los países con mayor tasa de muerte son Lesoto, Venezuela, México (con porcentajes en el inegi mortalidad), Argentina, Italia, Bulgaria, Hungría, Puerto Rico y Cuba.