Esta es la dermatofitosis más frecuente, representando casi el 70 por ciento de las tiñas, sin mencionar que al menos el 20 por ciento las personas son portadores asintomáticos de una tiña contagiosa. Es frecuente ver el hongo se traslade a zonas diversas del pie a través de las toallas, prendas de ropa contaminada, sábanas, etc.
Esta infección se presenta con mayor frecuencia en hombres que en mujeres y se ve tanto en niños como en adultos, siendo los atletas y deportistas, los individuos que presentan una mayor posibilidad de contagio, razón por la cual lleva su nombre.
Con respecto al contagio, este se presenta por transmisión directa de persona a persona, o en su defecto al entrar en contacto con superficies húmedas en las que el hongo persiste por meses, como es el caso de las toallas, alfombras, en cuarteles, colegios, saunas, hoteles, gimnasios, entre otros.
Por ello si se mantiene al pie húmedo por períodos de tiempo prolongado es muy probable que se contraiga esta infección, ya sea porque el calzado está mojado por acción del sudor que produce el pie o porque se ha empapado de agua, además de ello el uso de calzado cerrado como por ejemplo las botas incrementan también el riesgo de aparición o permanencia de la infección, esto se debe a que crea un ambiente caliente, húmedo y oscuro que favorece el crecimiento del hongo.