Debemos tener en cuenta que, según la mayoría de los estudiosos de la Teogonía, Hesíodo presenta las diferentes relaciones de los dioses y su participación en las vidas de los hombres no como historia literaria sino como algo completamente verdadero (según varias fuentes históricas adquiridas por Hesiodo) este conocimiento de una revelación de las Musas del Monte Helicon). Las historias de la historia de Hesíodo nos permiten conocer una era, una mentalidad y el origen remoto de la cultura occidental, porque no debemos olvidar que muchos conceptos e ideas de la Teogonía están presentes en el arte, la filosofía o la historia misma. Al mismo tiempo, no es difícil dar ejemplos del rastro cultural dejado por la Teogonía en nuestro lenguaje (palabras como hipnosis, funeral, erotismo, tifón, océano, cronología, pan, armonía y muchos otros).
En este caso podemos establecer que la teogonía no duda en determinar la existencia de tres generaciones de dioses:
- La generación del cielo y la tierra. Esto se compone principalmente de Gea y Urano, un primer par de dioses que fueron responsables de la configuración de animales, humanos, montañas, ríos, mares.
- La generación de los titanes. En esta segunda generación de dioses, figuras como Crono (Tiempo) y Rhea (Naturaleza) se encuentran entre los descendientes de Hestia (diosa del hogar), Hera (diosa del matrimonio), Poseidón (dios de los mares), Deméter (diosa) de la agricultura) o Hades (diosa de los muertos). Todo eso sin olvidar a Zeus tampoco.
- La generación de los dioses olímpicos. En cuanto a esto se establece que es el resultado del triunfo de Zeus sobre los Titanes lo que lo llevó a casarse con Hera para, desde allí, gobernar desde el Olimpo. Como resultado de esta relación, surgieron muchos otros dioses, como Apolo o Artemisa, entre otros.
