En la mayoría de los casos la aterosclerosis es la causa principal de de angina, el tabaco, colesterol sobrepeso, azúcar en sangre y la hipertensión pueden ser algunos de los factores que aumentan la formación de placas de aterosclerosis. Por lo general la angina de pecho se encuentra precedida por un momento de excitación ya sea emocional o física por parte del afectado, el comer en exceso alimentos con alto contenido de colesterol puede ser una causa importante que provoque esta afección, otra puede ser el conducir en horas de tráfico pesado, algunos casos no tan comunes se presentan cuando se realizan ejercicios en zonas muy frìas.
La angina puede presentarse de tres formas distintas, angina de esfuerzo, mixta y de reposo.
- Angina de esfuerzo: denominada así porque el dolor es causado por el esfuerzo que se realiza en cualquier actividad que requiera gran cantidad de oxígeno por parte del miocardio, el dolor suele ser corto y desaparece al dejar de realizar lo que lo originó.
- Angina de reposo: ocurre de forma repentina y sin la realización de ningún tipo de esfuerzo, la duración puede variar ya que en ocasiones se puede extender el dolor hasta el punto de parecer un infarto.
- Angina mixta: en esta clasificación se engloban todas aquellas características de la angina de reposo y la de esfuerzo.
Los principales síntomas de la angina de pecho son el dolor torácico que puede durar de 2 a 15 minutos y una fuerte presión detrás del esternón que puede extenderse hacia los brazos. La piel se torna pálida, se presenta sudoración profusa y el afectado puede tener la sensación de muerte durante los episodios de dolor.
Los tratamientos más recomendados por su efectividad, es la aplicación de nitroglicerina mediante una píldora que se coloca debajo de la lengua, esto tiene la capacidad de dilatar las arterias. También los betabloqueantes suelen ser eficaces, ya que bloquean en gran medida los efectos de la adrenalina en el organismo, logrando que el corazón disminuya los latido y por consecuencia la demanda de oxígeno.