Se plantea que el primer estudio bibliométrico fue elaborado por Cole y Eales. En este estudio se realizó un análisis estadístico de los libros o ediciones sobre anatomía comparativa entre los años 1550 y 1860, conforme a su entrega por países y las divisiones del reino animal. Posterior a esto, en 1923 E. Hulme quien era bibliotecario de la Británica de Patentes Oficina, realiza un estudio estadístico de la historia de las ciencias, estableciendo un primer avance a lo que en un futuro se llamaría cienciología.
Los estudios bibliométricos frecuentemente se clasifican según las fuentes de datos, las cuales se basan en: bibliográficas y resúmenes, referencias o citas, directorios o catálogos generales de títulos de revistas.
La bibliometría se aplica normalmente en: la elección de textos y publicaciones periódicas, en la identificación de los aspectos temáticos de la literatura; en la historia de la ciencia, valoración de bibliografías, identificación de países, organismos o escritores más productivos en un tiempo específico.
Algunas de las leyes bibliométricas son:
La ley de crecimiento Exponencial, su enunciado es el siguiente: “La ciencia crece a interés compuesto, multiplicándose por una cantidad determinada en periodos iguales de tiempo (cada 10-15 años se multiplica a sí misma por 2). La tasa de crecimiento es proporcional al tamaño de la población o magnitud total adquirida. Cuanto más grande es la ciencia más deprisa crece”.
Todo este enunciado corresponde con la siguiente expresión matemática:
N = N0 ebt
Ley de la productividad de los autores, esta ley demuestra que la relación trabajo/autor sigue una conducta persistente en determinadas eventualidades. Esta ley considera que partiendo de una cantidad de escritores con un solo trabajo acerca de un tema específico, existe la posibilidad de predecir el número de escritores con trabajos. Su fórmula es:
A(n) = K / n2
Ley de Dispersión de la Literatura científica, esta ley demuestra que en la elaboración de artículos en las revistas existe una desigualdad en la distribución, donde mayormente los artículos se encuentran concentrados en una pequeña población de revistas, mientras que una minúscula cantidad de escritos, se dispersa sobre una cantidad de artículos. Su fórmula es:
1:n:n2