El desarrollo o formación de un sistema de baja presión es denominada Ciclogénesis y trata de un término conformado por varios procesos similares que dan lugar al desarrollo de una determinada clase de ciclón y puede ocurrir en cualquiera de las escalas manejadas en meteorología (microescala y escala sinóptica) menos en la escala planetaria.
Existen diversos tipos de ciclones, sin embargo a continuación, serán nombrados algunos de ellos:
Ciclones Tropicales: conocidos también como tormentas tropicales, huracanes y tifones, conformados generalmente en océanos calientes, succionando la energía de la evaporación y la condensación. Se originan por la formación de centros de baja presión atmosférica dentro del mar.
Los ciclones extratropicales: son formados por latitudes mayores a 30° y se componen por dos o más masas de aire, la variedad de ciclones de este tipo son amplias y aún se mantiene en proceso la identificación de una subfamilia de este tipo.
Ciclones subtropicales: sistema meteorológico que tiene características similares al ciclón tropical al igual que al extratropical y suelen formarse en latitudes cercanas al ecuador.
Los ciclones polares son similares y del tamaño de los ciclones tropicales, aunque tienen una vida muy corta. A diferencia de otros ciclones éste desarrolla una rapidez extrema y alcanza máximo 24 horas de fuerza.
Por último los mesociclones: éstos emiten una inercia de rotación en capas presentándose en forma de nube, lo cual permite que incremente su rotación formando un tornado.