El crecimiento urbano acarrea en pos de varios inconvenientes como cambiar creencias, costumbres, cambios ambientales, migración de los mismo residente que antes pertenecían a esa comunidad, cambio de empleo y reformas de las viviendas, el cambio de la clase social en muchos los degradan a una clase que antes era media a una más baja con referencia a la que está llegando nueva.
El lado positivo es un crecimiento del pos valía de las viviendas, empleos nuevos, escuelas nuevas y un sinfín de mejoras que se pueden aprovechar para el beneficios de los residentes de la zona. Al planificar de buena manera este proceso tomando en cuenta todo el pro y el contra sería un beneficio mutuo que daría buenos frutos a largo plazo que pesar de ser una tendencia de años atrás donde la nobleza inglesa y francesa se adueñaron de este término inglés gentrification, que significa familia de bien o alta burguesía, no fue hasta los años 70 que se intensifico su uso cuando jóvenes de la época con la nueva era de pensamiento de expandir sus criterios en cultura, artes, ciencia y forma de vida, se mudan a los suburbios de las ciudades cercanas y en la actualidad es una acción que se ve cada día en diferentes partes del mundo.
Muchos de estos cambios son agresivos y trae consigo disputas entre los habitantes y los propietarios que desean hacerse de la zona descapitalizando a los residentes y esto lleva a un desgaste emocional y económico cuando no hay acuerdos de ambas partes, tenemos ejemplos donde el cambio radical lleva a la total desaparición de una comunidad. El arte se ha usado como unos de los cambios importantes creando un ambiente más limpio de vivos colores, al rescatar zonas que antes con el deterioro del tiempo y la falta adquisitiva quedaron en el abandono. En resumen, todo con el cristal que se vea y la buena disposición de los involucrados puede llevar a una vida plena y satisfactoria, haciendo que los nuevos residentes, los que estaban y la nueva generación vean el futuro de un nuevo comienzo de una comunidad en progreso.