«Gloria» es una de las palabras más comunes en las Escrituras. En el Antiguo Testamento, la palabra se usa para traducir varias palabras hebreas, incluyendo Hod (הוד) y kabod, y en el Nuevo Testamento se usa para traducir la palabra griega doxa (δόξα). La palabra hebrea kabod (K-B-D) originalmente significa «peso» o «pesadez». La misma palabra se utiliza entonces para expresar la importancia, el honor y la majestad. Las versiones griegas de la Biblia hebrea tradujeron este concepto con la palabra δόξα, que también fue utilizada extensivamente en el Nuevo Testamento. Doxa originalmente significa «juicio, opinión», y por extensión, «buena reputación, honor». Suponiendo que estas diversas palabras y usos se refieran a un solo concepto subyacente, San Agustín lo hace como clara notitia cum laude, «celebridad brillante con alabanza».
Discreta y reservada en apariencia, Gloria es una dama sociable y comunicativa. Ella es cautelosa y bastante selectiva, lo que significa que no toma amistad a la ligera y tiende a permanecer a la defensiva al principio. Sin embargo, bastante distante, posee una cierta distinción. Activa e ingeniosa, siente la necesidad de afirmarse, lo que no siempre es una tarea fácil gracias a la presencia del kármico
En el catolicismo, la doctrina católica afirma que el mundo fue creado como un acto de libre albedrío de Dios para su propia gloria. La doctrina católica enseña, sin embargo, que Dios no busca ser glorificado por sí mismo, sino por el bien de la humanidad para que lo conozcan.
En el cristianismo ortodoxa, la glorificación (también conocida como canonización) es el término usado en la Iglesia Cristiana Ortodoxa para el reconocimiento oficial de una persona como un santo de la Iglesia. El término cristiano ortodoxo theosis es aproximadamente equivalente al concepto protestante de la glorificación.