- Geneser Histología
Autores: Finn Geneser, Annemarie Brüel, Erik Ilso, Jorge Tranum-Jensen y Klaus Qvortrup. Año: 2015. Describe de manera didáctica y profunda las generalidades de este campo de estudio, mientras que a medida que avanzan los capítulos se intensifica la especificidad de los temas, centrándose en cada parte de los sistemas del cuerpo por separado. Adquiérelo aquí. - Texto de histología
Atlas a color. Autor: Leslie P. Garnert. Año: 2012. Contiene las descripciones de las características histológicas normales del cuerpo humano, sumado a esto presenta imágenes detalladas tanto en forma de gráficas representativas, como de verdaderos cortes histológicos. Adquiérelo aquí - Histología
Texto y atlas. Autores: Michael H Ross y Wojciech Pawlina. Año: 2016. Libro dedicado a las ciencias histológicas con un enfoque dirigido hacia la biología molecular, presenta imágenes representativas y sus respectivas descripciones. Adquiérelo aquí - Histología, embriología e ingeniería tisular bucodental
Autores: M. Gomez de Ferraris y A. Campos Muñoz. Año: 2019. Libro centrado en las características histológicas de todos los órganos y estructuras relacionadas a la cavidad bucal. Adquiérelo aquí
Qué es histología
Es la ciencia que estudia la constitución microscópica de los diversos órganos y sistemas que componen el cuerpo humano, abarcando incluso los componentes que forman la célula, que es considerada la estructura anatómica fundamental del cuerpo.
Desde el punto de vista etimológico proviene de la combinación de dos términos de origen griego, el primero histós, que hace referencia a tejido, seguido de logos, que significa estudio o tratado.
Historia de la histología
Los primeros indicios de los estudios histológicos datan de la época antes de Cristo, conocida como la etapa premicroscópica, en manos de investigadores como Empédocles en primer lugar, quien mantenía que el cuerpo lo constituían los cuatro elementos fundamentales el aire, agua, fuego y tierra, seguido por Hipócrates, médico que concluía que el ser humano se componía de 4 humores fundamentales, el negro, el amarillo, sangre y bilis, sosteniendo que estos deben mantenerse equilibrados para evitar las enfermedades.
Posteriormente inicia la etapa microscópica, con la creación del microscopio en manos de Zaccharias Janssen y Hans Janssen, luego de extenderse el estudio a través de la microscopía en diferentes partes del mundo, iniciaron los descubrimientos e investigaciones en el área.
Por ejemplo, en 1661 se descubrió la presencia de capilares tanto arteriales como venosos a nivel pulmonar, logrando explicar cómo ocurre el intercambio gaseoso a nivel alveolar. Malpighi en 1666 observa por primera vez glóbulos rojos en la sangre y les atribuye a estos el color rojo de la misma.
En 1831 el médico y botánico Robert Brown descubrió corpúsculos en el interior celular a los cuales decidió llamar núcleo en el caso de las células eucariotas. Posteriormente en 1838 Jan Purkinje estudio células nerviosas, observando por primera vez estructuras como las dendritas neuronales.
En 1883 gracias a las investigaciones de Jacobson, hubo un gran avance en las técnicas necesarias para mejorar los estudios histológicos, el mismo utilizó ácido crómico para teñir los tejidos que serían observados en el microscopio mejorando la diferenciación de estructuras entre sí, abriendo la puerta a los métodos de fijación y tinción de las muestras.
Años después el científico Langerhans en sus estudios de páncreas histología, descubrió la presencia de los islotes en el órgano que hoy en día llevan su nombre, de esta manera durante las décadas siguientes los estudios de diversos órganos se fueron desarrollando y permitiendo expandir a profundidad los conocimientos en cuanto a las estructuras microscópicas que componen a los mismos.
Por último se encuentra la etapa actual conocida como postmicroscópica, la cual incluye principalmente las investigaciones realizadas posterior a la creación del microscopio electrónica, permitiendo incluso la elaboración de libros de histología y atlas de histología que presentan de manera detallada imágenes descriptivas sobre los diversos tejidos que forman parte del cuerpo, facilitando su estudio y enseñanza.
Junto con la creación de la microscopía electrónica se obtuvieron numerosos avances en el campo de la medicina, ya que permitió observar partículas de células, proteínas y virus que colaboraron en las investigaciones de numerosas patologías.
La histología en la actualidad, cuenta con campos de investigación muy efectivos y exactos, tal es el caso de la citología, estos estudios, han contribuido de manera significativa en la búsqueda de la cura de enfermedades de transmisión sexual, también en la respuesta del enigma del cáncer.
Ramas de la histología
Como todas las ciencias, esta presenta ramas que se dedican a porciones específicas de la misma, permitiendo investigaciones más detalladas en el campo. En la actualidad, se da paso a una clasificación muy simple de la histología, por una parte, se le conoce como histología animal, a la investigación en tejidos de animales y la histología vegetal, con una visión botánica, se concentra en la búsqueda de relaciones con los tejidos de plantas y frutos obtenidos de la tierra.
Histología animal
Esta rama se encarga exclusivamente del estudio de los tejidos que forman parte de los animales, incluyendo a los seres humanos, estos presentan ciertas características específicas que le otorgan una mayor complejidad estructural y funcional en comparación a los vegetales.
En términos generales, esta rama divide los tejidos animales en cuatro grandes grupos que son los tejidos epiteliales, los tejidos conjuntivos, los musculares y el tejido nervioso. Uno de los libros más populares y utilizados de esta rama es el de histología Ross.
Histología vegetal
Esta se centra en el estudio a profundidad de los diversos tejidos y componentes que forman estructuralmente a las plantas, para su análisis lo dividen en dos grandes grupos, uno conocido como los tejidos de crecimiento (meristemáticos) y otro como los tejidos adultos (parenquimatosos), en este último se incluyen los de soporte, secretores, conductores y protectores.
Aplicaciones de la histología
Esta ciencia se aplica en diferentes ramas de importancia a nivel de la salud de los seres vivos, permitiendo el conocimiento más detallado y microscópico de los diferentes órganos y tejidos que componen al cuerpo. De esta manera permite determinar cuales son las condiciones idóneas y sanas de estos tejidos y de esta manera poder compararlos con situaciones en las cuales se presenten patologías en ciertas zonas.
Al poder diferenciar las características histológicas de un tejido sano de uno que presente algún tipo de alteración permite y facilita el diagnóstico de enfermedades, así como emprender investigaciones en torno a posibles causas y tratamientos de las mismas.
Con los estudios histológicos, la medicina ha encontrado curas y vacunas a una diversidad de enfermedades entre las que se destacan aquellas producidas por cepas de virus nacidas en animales y plantas.
Ejemplos de histología
Gracias a esta ciencia se logran distinguir de manera clara las diferencias entre células y tejidos sanos de otros que presenten alteraciones debido a la presencia de alguna patología específica.
En el caso específico por ejemplo del intestino delgado histología, la normalidad de este órgano histológicamente hablando, presenta las siguientes características:
Presenta una capa de tipo serosa que cubre la pared, seguida de dos capas de musculatura lisa, una submucosa y una mucosa, a su vez estructuralmente está formada por pliegues de las cuales se proyectan unas prolongaciones denominadas vellosidades hacia la luz, cuyo objetivo principal es la de captar nutrientes, cada milímetro de la mucosa intestinal presenta entre 30 y 40 de estas microvellosidades.
Por otra parte, en la presencia de patologías como por ejemplo de tipo vascular (infartos o isquemia) producen alteraciones típicas como la presencia de un epitelio intestinal necrótico, con coloración oscura debido a la hemorragia intraluminal, la mucosa se observa totalmente edematosa y con focos hemorrágicos y pueden presentarse úlceras que se extienden hasta las paredes musculares.
El bazo histología normal presenta como características principales la existencia de una cápsula conformada por tejido conjuntivo y que presenta trabéculas dirigidas hacia el interior del órgano, la parte estructural o parenquimatosa se compone de dos porciones denominadas pulpa roja y pulpa blanca, la última está compuesta principalmente por linfocitos, mientras la roja es rica vascularmente.
Cuando existe alguna patología a nivel del bazo como la esplenitis, las alteraciones histológicas más frecuentes son la presencia de un aumento en la cantidad de células linfocíticas presentes en el parénquima, así como un aumento en la cantidad de células inflamatorias alrededor de los vasos sanguíneos presentes, con posible marginación intravascular.
En el caso particular del ganglio linfático histología, este se presenta con dos porciones diferenciadas la corteza y la médula. La primera se encuentra compuesta por una gran cantidad de folículos tanto primarios como secundarios ricos en linfocitos B, mientras que en la médula además de la presencia de linfocitos y otras células de defensa, se encuentra una red extensa de vasos sanguíneos y sinusoides linfáticos.
Las alteraciones de tipo histológica comunes en este tejido durante procesos inflamatorios permiten observar un aumento continuo de las células de tipo inflamatorio en la zona, la cual se va extendiendo hasta llegar al punto de destruir al ganglio y ser sustituido por un simple acumulo de células inflamatorias en el área.
El hígado histología corresponde a un órgano cubierto por una cápsula de tipo conjuntiva, denominada cápsula de Glisson y un parénquima dividido en lobulillos, denominados lobulillos hepáticos, las células principales y características del hígado son los hepatocitos, se organizan en cordones y son de tipo epitelial.
Durante procesos patológicos de daño hepatocelular como por ejemplo al inicio de la cirrosis hepática, estas células aumentan de tamaño y hay alteraciones en su morfología normal, esto principalmente debido a la acumulación de proteínas y agua en el interior del citoplasma del hepatocito. De igual manera inicia un proceso de fibrosis alrededor de los sinusoides hepáticos, con aumento del colágeno en la zona.
Otro ejemplo de importancia es el caso particular del riñón histología, al igual que en otros órganos en el parénquima o parte estructural se observan dos zonas, la corteza que es la zona más externa y la médula en la cual se localizan dos estructuras de importancia como lo son el asa de Henle y los túbulos colectores.
En este órgano existen ciertas alteraciones o cambios a nivel histológicos relacionados al avance de la edad, entre ellos se pueden observar atrofia de los túbulos, presencia de fibrosis a nivel intersticial, y esclerosis glomerular.
