Ésta, debido a que el latín era la lengua oficial de la región y fue escrita en el mismo, ha sufrido con las numerosas traducciones realizadas a la biblia desde su más tierna existencia, por lo que en los distintos evangelios puede ir de “Rey de los Judíos” a “Éste es Jesús, Rey de los Judíos”. Sin embargo, es partir de la primera versión dada (Jesús de Nazaret, Rey de los Judíos), de la que nace el popular acrónimo. Este titulo no fue exclusivo para Jesucristo, puesto que se trataba de una práctica bastante común en las crucifixiones romanas, en las que, sobre las cabezas de los ejecutados, se indicaban su nombre, domicilio y crimen cometido; como existía una redacción libre, las mofas o burlas eran permitidas.
La interpretación que brindan sociedades esotéricas, están relacionadas con el paganismo. Estos afirman que INRI puede tratarse tanto de Igne Natvra Renovatvr Integra (Por el fuego se renueva completamente la naturaleza), como de In Necis Renacere Integer (En la muerte renacer intacto y puro).