La onicofagia está presente en las imágenes de ansiedad y generalmente está relacionada con el nerviosismo y el estrés. Cuando este hábito se vuelve crónico (es decir, se desarrolla permanentemente), se pueden evaluar las alternativas al hambre, el aburrimiento o la inactividad, pero también debemos considerar la posibilidad de que pueda ser un síntoma de un trastorno mental o emocional.
En los casos más severos, estos efectos pueden incluso causar la pérdida total de la uña. Es un comportamiento frecuente entre los niños y adolescentes que tiende a desaparecer en la edad adulta.
En la mayoría de las personas que no pueden dejar de comerse las uñas, existe una alteración del sistema nervioso o un desequilibrio emocional que puede ir desde casos leves y específicos hasta casos crónicos y patológicos de gran preocupación. El comer las uñas es para muchas personas una válvula de escape para su nerviosismo (ansiedad, estrés, impaciencia, miedo, etc).
La onicophagia causa desgaste en los dientes y daños en el esmalte debido al constante chasquido de un incisivo contra el otro cuando se muerde las uñas, lo que conduce a un problema estético porque los dientes se cortan, los dientes pueden caerse eventualmente y las úlceras en el cena. Todo esto es causado por las puntas puntiagudas de las uñas que pueden estar contaminadas.
Morderse las uñas puede afectar la capacidad de sostener objetos con las manos y el sentido táctil del dolor que se siente por la pérdida de la uña. Algunos «consejos» que serán útiles Antes de realizar un tratamiento en el hogar o consultar a un especialista, evite tanto como sea posible el café, el té, las bebidas cola o las bebidas alcohólicas, ya que tienden a generar más ansiedad y nerviosismo. Tienes que evitar el automatismo de comer tus uñas. Lo más importante es tomar conciencia o ver antes de qué situaciones concretas la persona no puede evitar comerse las uñas.
Una vez que la situación está localizada (nervios, estrés, aburrimiento, etc) tenemos que hacer que la persona cambie esa asociación mental (nervios = comerse las uñas) e intentar, momentáneamente, introducir otra asociación (mordisquear una fruta, una rama de alguna planta medicinal, respire profundamente, traqueteo con los dedos sobre la mesa, etc). Tome una dieta variada (frutas, verduras, cereales, productos lácteos, carnes).