Victimización
Es así como se le llama al proceso psicológico en el que un individuo intenta engrandecer, exagerar o modificar los detalles de una historia, con el fin de que sea percibido como una víctima. Esto, por lo general, despierta la empatía del entorno hacia quien fue ultrajado, de alguna forma, por personas, organizaciones, entre otros; así, el afectado puede conseguir afecto, apoyo y demás beneficios, tanto emocionales como físicos (dinero, bienes). Estas situaciones se dan sólo en personas que pueden estar atravesando situaciones difíciles o, bien, padecen ciertas condiciones psicológicas que les impide poseer el desenvolvimiento emocional y psicológico de una persona promedio sana.
En el campo psicológico y penal, la victimización es el proceso en el que un sujeto pasa a ser víctima de un delito; hecho que da cabida a una rama de la piscología llamada “victimología”, en la que se explican los rasgos de quienes son más propensos a ser víctimas de un delito y cuál es el papel de las víctimas en la fechoría.
Cabe destacar que, la victimología, no sólo se remite a las víctimas de delitos urbanos usuales, sino también a aquellos productos de los conflictos bélicos, accidentes de tránsito, desastres naturales y abusos de poder. En esta, se presentan las llamadas teorías de la victimización, en donde, a través de la victimogénesis y la victimo dogmática, se es capaz de determinar si alguien es propenso a ser víctima de un delito, basándose en su edad, sexo, condición física, grupo racial y género, a lo que se le suman otros rasgos psicológicos.


