La glicerina liquida resulta difícil de congelar, sin embargo, puede cristalizarse en una temperatura baja, se puede disolver en el agua y en el alcohol, no así, en el éter u otros disolventes orgánicos. Frecuentemente la glicerina se emplea en la fabricación de resinas alquídicas así como de la pasta dental y los artículos de aseo. Solo el 5% de su producción industrial es destinada a la elaboración de explosivos y sus derivados, como es muy resistente a desleírse en los líquidos del petróleo, sirve para engrasar las maquinarias que extraen los productos derivados de los hidrocarburos, por ser tan glutinoso y carecer de toxicidad, la glicerina resulta ser un magnifico aceite para las maquinas procesadoras de alimentos.
En el pasado la glicerina estaba integrada en los compuestos del jabón, el cual le facilita una particularidad adicional. En un principio se comenzó a separar cuando apareció la formula de la nitroglicerina, que es un explosivo destinado a la elaboración de bombas. La glicerina en su estado natural, y en cantidades adecuadas, no resulta dañino para la salud de las personas.
En el aspecto medicinal, la glicerina es empleada como un excipiente para diluir los principios activos de varios medicamentos, para que de esta manera puedan ser asimilados por el organismo. Como endulzante, es empleado como suplente del azúcar, aunque es un 40% menos dulce que este, por lo que no eleva tanto los grados de azúcar en la sangre.