Los principales referentes de esta reforma fueron sin lugar a dudas Martín Lutero y Juan Calvino, a los cuales se les denominó como los “reformadores”. El emperador Carlos V, que ejercía de forma paralela a este cargo como Rey Carlos I de España, fue uno de los principales objetores de las propuestas reformistas. Para inicios del siglo XVI, en la Alemania renacentista se dieron a conocer una serie de señalamientos de corrupción en contra la Iglesia Católica: en los cuales se les acusaba de vender indulgencias; es decir, que se libraba a los creyentes de la obligación de cumplir penitencias por causa de sus pecados, a cambio de una suma de dinero a la iglesia.
Cabe aclarar que dichas indulgencias ya existían desde antes, las críticas estaban enfocadas al hecho de que las mismas eran vendidas, en especial porque el dinero que se recaudaba se utilizaba para llevar adelante la construcción de la Basílica de San Pedro. Por ello el sacerdote alemán Martín Lutero, toma la iniciativa de presentar un documento al que denominó «Las 95 Tesis«, colocándolo en la puerta de la Iglesia de Wittenberg. El gobierno de Roma notando que la sociedad noble y burguesa tenían poder para su autoridad, razón por la cual Carlos V convocó a una asamblea, a la que se le conoció como Dieta de Worms. En ella se le exigió a Lutero que explicara su posición, sin embargo éste no logró convencer al emperador.
Posterior a esto se iniciaron en la iglesia una serie de cambios en la práctica religiosa para diferentes países, sin importar la oposición del emperador. Uno de los recursos que funcionó a favor de los reformistas fue la utilización de la imprenta para difundir sus ideas. La oposición a Roma fue bien vista en países como Suiza e Inglaterra. Siendo uno de los de los responsables de su difusión en Suiza Juan Calvino, El cual apoyaba principios religiosos más rígidos.
Carlos V y el luteranismo, basaron su disputa en asambleas para tratar de unificar la fe por medio de discusiones doctrinales. Pero a pesar de ello, el luteranismo tuvo un ala radical que se separó de la corriente principal del cristianismo.