Posteriormente a la edad de 13 años el director de la escuela en donde estudiaba le presentó un método de lectoescritura para ese entonces innovador, creado por Charles Barbier para fines militares y cuyo objetivo era la transmisión de órdenes a los soldados evitando que se descubriese la posición de los mismo, luego de un tiempo Braille se dio cuenta de que dicho sistema tenía potencial, por lo que decidió modificarlo, dando como resultado el famoso método Braille.
Este sistema consiste en la utilización de seis puntos que se encuentran distribuidos de formas diferentes, pudiendo incluso ser considerado como una especie de sistema binario. Cabe resaltar que el método Braille es un alfabeto y no un idioma, este alfabeto es reconocido a nivel mundial y con él es posible expresar tanto letras como números e incluso signos, lo que lo convierte en algo sumamente complicado. Los elementos utilizados en este alfabeto son en total 256 caracteres, los cuales en su mayoría tienen estrecha relación con aquel que se le antepone o que le prosigue respecto al significado.
Todos y cada uno de los caracteres se encuentran basados en los seis puntos antes mencionados, los cuales deben ser ordenados en un par de filas paralelas una de la otra. Dependiendo del significado que el escritor quiera dar algunos puntos pueden estar sobresaliendo para que al momento de entrar en contacto con él se pueda identificar el correcto significado de lo allí plasmado. A pesar de que la escritura Braille es un sistema considerado como universal, es posible que éste pueda llegar a presentar modificaciones según sea el idioma de quien lo utilice, para lo cual se le pueden incluir letras o ser sustituidas por otras que son utilizadas en un idioma específico, esto se puede ver plasmado en idiomas como el mandarín o el japonés en donde los sonidos se pueden mezclar con el Braille.